Antofagasta

Es un buen nombre, tiene carácter. Estuve ahí una semana y recibí por primera vez la noticia de que estoy en la final de un concurso de cuentos. Cool, ¿no estoy tan perdido?

Me llegó un email en formato spam notificándome que en http://www.atinachile.cl/ estaba en los finalistas. Espero que me llegue además el concurso de cuentos de Paula, el de novela de Clarin, como uno en España no sé en qué poblado.

Antofagasta me deslumbró. Tiene calles atestadas, y hay un sonsonete norteño. Hasta me lo traje de vuelta creo, como le pasa a Zamorano en cada viaje a la madre patria.
Voy en la conquista de nuevas tierras, y a pesar de haberme robado unas piedras en Atenas, aún no se me va la capacidad de asombro.
Bueno, la verdad que el día que se me vaya, estaré claro: he muerto.

CANTORES

Es posible escribir un blog en la mitad de una fiesta. Unos cantores de trova hacen de una noche un elemento de encuentro de 3 hermanas de 65, 55,52 y un hermano mayor que nació el 37, así que hagan uds el cálculo.
Es como hacer una bufanda en una noche de lluvia, los dedos avanzan en el guitarreo del señor cantor Pepe, que le puso humo al salón.
Es una historia que había bajo la alfombra, mi padre se reunió con sus hermanas por última vez. Le miré con sus ojos chinos, sabiendo que las reuniones de despedida son así.
Cómo se nos pasa la vida en esa canción de Gracias a la Vida, un flash de fotografías de cuando vivían en Valpo, Rancagua y Santiago.

Y yo ahi, escribiendo y viendo los bailes. Es raro, pero me entretengo.

abducido

Me siento así, poseído por lo que escribo, se me arman diálogos.

Pucha, en todas las decisiones que estoy tomando me pregunto si le daré el palo al clavo.

Uno no sabe si los pasos hacen avanzar o estancarse.

Pero ya estoy peludo, hay que echarle no más, y tinquehue no falla never.

Ese elemtno instintivo nos lleva, nos hace avanzar.

Por eso me siento abducido, una energía me lleva.....donde iré?

Hoy hice una pauta para cinco paginas nuevas de mi novela. Y corrí con los dedos como autómata. Me creerían que pienso y siento que Macoña será mi 100 años de soledad.

¿Por qué?

No sé, estoy más hediondo y creativo: dos conceptos como que van juntos.

Por otra parte, he mandado varios cuentos y novelas a concursos. Mi novela anterior sigue anónima:bueno en todo lo soy yo aún en este oficio. Pero es un latido, que viene más fuerte, quizás porque me aprendí el teclado de memoria.

Son las fiestas patrias y sólo me pregunto que barbaridad se me ocurrirá para mañana y pasado:días libres, días de creación del best seller.

Estoy focus, mirando claro.

Tic tac, ya me aprendí el martilleo. Sólo espero el momento.