Hice una pendejada.
Ja.
Hace días que veía a una niña pasear de ropas ajustadas.
La abordé, como buen escritor. Le dije "eres la mujer màs atractiva de la universidad".
Ahí me sentí energúmeno. Esas huevadas las hacía de 15.
Y quedé frente a ella y ella quedó lelo. Me preguntó mi nombre.
Yo sólo quería decirle que era estupenda. Fallé, no planifiqué la frase a continuación.
Falta de práctica quizás.
Cuando me dijo que tenìa 18. Uf, me sentí un viejo de mierda. Cero posibilidad. Se me pasaron los años y no me di cuenta.
Pero, espèro haberle alegrado la tarde con el piropo. Bien merecido por cierto.